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Abre “Gallinas y Focas”, el primer restaurante de Madrid enfocado a la inclusión laboral de personas con discapacidad intelectual

Restaurante Gallinas y Focas. Foto: Fundación AMÁS

Restaurante Gallinas y Focas. Foto: Fundación AMÁS

 

Ubicado en la zona más gastronómica de Chamartín (General Gallegos, 1. Madrid), Gallinas y Focas es un ejemplo de la inclusión efectiva de un equipo de jóvenes con capacidades diferentes. Su ‘cocina con valores’ es una propuesta gastronómica sólida, basada en el mejor producto de cercanía y en recetas tradicionales renovadas, con un impecable servicio.

 

«Restaurante Gallinas y Focas” es un proyecto auspiciado por Fundación AMÁS con el objetivo de defender los derechos de las personas con discapacidad intelectual y brindar oportunidades de formación práctica y empleo en distintos ámbitos laborales como la hostelería.

El gran valor de este restaurante de cocina de alta calidad, es la inclusión laboral de jóvenes con discapacidad intelectual para contribuir a la creación de una sociedad más justa y solidaria. Todas las personas que trabajan en el restaurante forman parte de un programa especial de formación –unos como alumnos y otros como profesionales de apoyo– que va ya por su tercera promoción.

Detrás del restaurante Gallinas y Focas se encuentra la iniciativa social de Fundación AMÁS, una entidad pionera que defiende los derechos de personas con discapacidad intelectual. A través de su escuela y sus centros ocupacionales propios, la organización les ofrece oportunidades de formación profesional adaptada y eminentemente práctica que les preparan para dar el salto a la vida laboral, aumentando sus posibilidades de inserción y, por tanto, de desarrollar su autonomía y sus proyectos de vida. Su proyecto más asentado es el catering socialmente responsable AMÁS Antojo.

Restaurante Gallinas y Focas. Foto: Fundación AMÁS

Restaurante Gallinas y Focas. Foto: Fundación AMÁS

Un equipo muy especial

Actualmente, la plantilla del restaurante Gallinas y Focas la integra un total de 20 profesionales contratados, once de ellos con discapacidad intelectual (ocho en sala, uno en cocina y otro, en office), con una edad media de 25 años.

Para la mayoría de ellos, se trata de su primera experiencia laboral; otros proceden de la ‘cantera’ de AMÁS Antojo. Los jóvenes cuentan con una figura de apoyo, un profesional de Fundación AMÁS que funciona como coordinador y puente con la etapa formativa previa. Cada puesto de trabajo se adapta al perfil del trabajador atendiendo a sus capacidades, es decir, potenciando lo que mejor se le da a cada uno (la recepción al público, la atención telefónica, el servicio de mesa, etc.). Porque la idea que subyace al proyecto es que las personas con discapacidad tienen, en realidad, otras capacidades, únicas e igual de valiosas.

Trabajador del Restaurante Gallinas y Focas. Foto: Fundación AMÁS

Trabajador del Restaurante Gallinas y Focas. Foto: Fundación AMÁS

Es un proyecto inspirador y pionero, llamado a romper barreras con la clientela. Ésta, libre de prejuicios, valora muy positivamente tanto la calidad de la cocina como el impecable servicio en sala, resultado del tesón y las ganas de agradar de estos profesionales. Mónica es una de las camareras. «He hecho una formación de tres años en hostelería. Tras varios cursos y formaciones con Fundación AMÁS, he conseguido finalmente ser una trabajadora más de Gallinas y Focas. Para mí, trabajar en el restaurante ha sido una lucha por tener un trabajo y, la verdad, estoy muy contenta», comenta.

Cocina con valores

El Restaurante Gallinas y Focas se encuentra en el local que ocupó La Chamartina, de la conocida restauradora Pepa Muñoz (El Qüenco de Pepa), muy comprometida con las causas sociales. La última etapa de La Chamartina, en la que se integró parte del equipo de Fundación AMÁS, fue el germen del restaurante Gallinas y Focas, que ahora ha querido lanzarse en solitario, ya desvinculados de Pepa. Para ello, han contado con el restaurador y consultor Ramón Dios (El Mesón de Fuencarral) como coach gastronómico y con el estudio de interiorismo Dorotea para el cambio de imagen, más fresca y actual, con mesas altas junto a su  mítica barra y con tres cálidos salones.

Cocina tradicional con aires renovados y productos de calidad en el Restaurante Gallinas y Focas. Foto: Fundación AMÁS

Cocina tradicional con aires renovados y productos de calidad en el Restaurante Gallinas y Focas. Foto: Fundación AMÁS

Su variada cocina está inspirada en la cocina tradicional con aires renovados, sabrosa y de calidad. La carta abre con una sección de tapas y entrantes, con raciones como las croquetas de la abuela (de jamón ibérico), las sardinas ahumadas con tomate, la tortilla guisada con salsa de callos, el pisto con huevo frito y patatas o la escalivada con bacalao skrei. Entre los principales, destacan el arroz meloso con boletus, los farfalle frescos con rabo de toro, la merluza gallega a la romana, la carrillera de cerdo con puré de batata y pera y el picantón con cinco especias chinas. Se pueden acompañar con un rico pan blanco o de naranja y cacao hecho también por personal de la asociación. Como postres, ofrecen un dulce arroz con leche y una deliciosa torrija de brioche con sopa de chocolate blanco. La carta de vinos es un recorrido seleccionado por las principales D.O. españolas. Pero, además, en ella destaca el vino homónimo, Gallinas & Focas.

El vino Gallinas & Focas

El nombre del restaurante procede del vino mallorquín que elabora la entidad Amadip Esment Fundació junto a 4 Kilos Vinícola, bodega dirigida por el enólogo Francesc Grimalt. La fundación se dedica, desde hace más de 30 años, a ofrecer oportunidades de inserción sociolaboral a personas con discapacidad intelectual, en Mallorca, a través de sus restaurantes y de la gastronomía.

 El nombre del vino surgió a partir de una lluvia de ideas entre los integrantes de Amadip Esment: «las gallinas son divertidas y las focas aplauden». La buena relación y la amistad entre la entidad mallorquina y Fundación AMÁS han posibilitado que se comparta el nombre.

Propuesta gastronómica del Restaurante Gallinas y Focas. Foto: Fundación AMÁSl

Propuesta gastronómica del Restaurante Gallinas y Focas. Foto: Fundación AMÁSl

Con denominación VI de la Terra de Mallorca, elaborado con Mantonegro, se trata de un vino muy expresivo con aromas de frutas rojas, equilibrado y con buena acidez. Se cría durante 12 meses en barricas de roble Allier y durante seis meses en foudre de roble francés y se comercializa tras seis meses de crianza en botella.

Premio a la acción más comprometida

El pasado 8 de octubre, en el marco de la IV edición del Día de la Hostelería –un evento organizado por Hostelería de España, la Federación de Cocineros y Reposteros de España (Facyre), Euro-Toques y Makro, que rinde un homenaje al sector y destaca su importancia en la sociedad y en el desarrollo de la economía nacional–, el restaurante Gallinas y Focas recibió su primer reconocimiento: el Premio a la Acción más comprometida. Un importante espaldarazo que pone en valor este proyecto social tan necesario.

Ven a conocer el Restaurante Gallinas y Focas y colabora en la inclusión laboral de forma normalizada de las personas con discapacidad intelectual.

¡Te esperamos!

 

RESTAURANTE GALLINAS Y FOCAS

Dirección: General Gallegos, 1. Madrid

Tel.: 91 345 44 98

Horario: de 13:30 a 16:30 y de 20:30 a 00:00 h. Cierra domingos noche

Página web: www.restaurantegallinasyfocas.es

Precio medio: 30 €

Aparcacoches de miércoles a domingos

 

 

“Vidas extraordinarias”: El derecho de las personas con discapacidad intelectual de Fundación AMÁS a ser protagonistas de sus sueños

José María Mateo realizando entrenamiento para la vida independiente dentro del programa "Vidas extraordinarias". Foto: Fundación AMÁS.

José María Mateo realizando entrenamiento para la vida independiente dentro del programa «Vidas extraordinarias». Foto: Fundación AMÁS.

 

 

Viajar, vivir en pareja, montar en bicicleta, ser independiente…no hay sueños grandes ni pequeños y todas las personas tenemos derecho a luchar para alcanzarlos. Mujeres y hombres con discapacidad intelectual no deben ser una excepción y ese es el objetivo de “Vidas extrordinarias”. Te invitamos a conocer sus historias de vida y sus sueños cumplidos en el Centro Municipal de la calle Sufragio en Leganés, gestionado por Fundación AMÁS.

 

 

La PERSONALIZACIÓN, es junto con INCLUSIÓN y CIUDADANÍA, uno de los tres irrenunciables que Fundación AMÁS defiende como entidad dedicada a los derechos y calidad de vida de las personas con discapacidad intelectual.

Y por ello, todos los centros de Fundación AMÁS se centran de forma individual en cada persona, sus profesionales indagan lo que cada una necesita para ofrecer los apoyos necesarios. Los centros se convierten en la pista de despegue y no en el destino, cada persona con diversidad funcional busca sus sueños en las calles de sus barrios, en los centros culturales, empresas, comercios, centros de ocio, instituciones públicas…

Los profesionales de Fundación AMÁS, llamados “incluyer” son los encargados de derribar barreras para hacer realidad los sueños. Son cientos de historias de personas reales, con sus proyectos, sus deseos y esperanzas. En esta ocasión os invitamos a conocer a algunas de estas personas en el Centro Ocupacional Sufragio de Leganés.

Conchi Martínez en un viaje con su pareja. Foto: Fundación AMÁS.

Conchi Martínez en un viaje con su pareja. Foto: Fundación AMÁS.

Conchi Martínez: Pareja, viajes y baile.

Como cualquier mujer Conchi tiene sus sueños, conocer a alguien especial, compartir ocio, viajes románticos o aprender a bailar. Es una mujer con diversidad funcional y tan solo necesitaba apoyos y ese “empujón” para salir al mundo y emprender una vida rica en experiencias, sueños cumplidos y por qué no, amor o desamor, como todo el mundo.

A día de hoy Conchi tiene novio, aún no se plantea la convivencia pero si realizar viajes en pareja juntos, como los que ha disfrutado en pareja a través de los Programas de Respiro y el Servicio de Ocio de Fundación AMÁS.

El empoderamiento que ha llevado a su vida ha animado a Conchi a realizar otras actividades inclusivas como asistir a un taller de baile donde comparte afición con personas con o sin discapacidad.

Ana María García. Foto: Fundación AMÁS.

Ana María García. Foto: Fundación AMÁS.

Ana María García: “Estoy muy contenta, en octubre viajo a Lourdes”.

Ana es una mujer con fuertes convicciones religiosas, asiste a misa con regularidad pero tenía un sueño desde hace cuatro años, algo que le parecía muy difícil de realizar, pero como todo en la vida es cuestión de luchar y ese sueño ya se ha hecho realidad.

En octubre Ana María viajará a Lourdes acompañada de un grupo de monjas y la sonrisa de su cara es el mejor exponente de la importancia que tiene para esta mujer cumplir con este deseo. “Me voy a Lourdes, estoy muy contenta”. Su expresión de felicidad cuando recibió, por parte de la orden religiosa que la acompañará, una maleta corporativa para el viaje era la señal de que Ana María estaba a punto de cumplir su objetivo vital.

José María Mateo: Conquistando la independencia.

José María tiene dos objetivos importantes en su vida que compartimos todas las personas: Trabajar y vivir de forma independiente.  Lo que para el resto de ciudadanos es casi un derecho, para él son barreras. Sin embargo, para eso se creó “Vidas extraordinarias” en Fundación AMÁS, para derribarlas.

Tras analizar sus necesidades personales, el equipo de profesionales del Centro Ocupacional Sufragio, han buscado vías para que José María cumpla sus sueños. Así ya está realizando una formación para la vida independiente en un piso de entrenamiento en Avante3 al que asiste un fin de semana al mes.

Un primer paso que para José María es importante, supone demostrar sus capacidades y su empeño para vivir de forma inclusiva.

José María Mateo. Foto: Fundación AMÁS

José María Mateo. Foto: Fundación AMÁS

Guillermo Hurtado: Pedaleando en familia

Guillermo Hurtado. Foto: Fundación AMÁS.

Guillermo Hurtado. Foto: Fundación AMÁS.

La familia de Guille es aficionada al ciclismo, para él resulta más complicado, una limitación que le impedía compartir con los suyos momentos de ocio y deporte al aire libre.

En este caso era un sueño compartido por la familia y el propio Guillermo que el equipo del Centro Ocupacional Sufragio ha hecho realidad. Y los resultados son espectaculares, además de un ejemplo de inclusión y solidaridad por parte de la comunidad: Tras contactar con un club de ciclismo de Leganés llamados “Los Vinagres”, estos deportistas no solo han enseñado a Guillermo a montar en bici, sino que le han diseñado una bicicleta especial para sus necesidades.

Guille es un chico joven más, ahora puede compartir aficiones con su familia “Monto en bici y también voy a la montaña a escalar con mi hermana”, nos dice sonriente.

Es un exponente de trabajo en equipo: Familia, profesionales y entorno, suman inclusión, derechos y sueños cumplidos. 

Brenda Ratón: La pasión por el dibujo.

Los sueños de esta joven con diversidad funcional pasan por sus lápices y hojas en blanco donde mostrar la visión de su mundo a través del color y la expresión.

Sueños que ya se están materializando a través de la Asociación Debajo del Sombrero, que ha seleccionado uno de sus dibujos en uno de los proyectos artísticos de esta asociación.

El objetivo es empoderar a Brenda, junto a otras personas con dificultades cognitivas o de desarrollo, para que se forme como artista profesional con su propio estilo.  De hecho, Brenda irá acompañada de otros dos compañeros de Sufragio y Centro ocupacional Pinos, en esta nueva y apasionante aventura.

Un reconocimiento que Brenda muestra con la mejor forma de comunicación, su enorme sonrisa.

Brenda Ratón. Foto: Fundación AMÁS.

Brenda Ratón. Foto: Fundación AMÁS.

Centro Ocupacional Sufragio en Leganés: La fábrica de sueños.

Son muchas más las personas que están consiguiendo metas personales a través del compromiso de ORP (Orientación a Resultados Personales) en otros centros y servicios de Grupo AMAS.

En esta ocasión nos centramos en el Centro Ocupacional Municipal de la calle Sufragio, en Leganés, gestionado por la entidad, para conocer el funcionamiento de esta fórmula, “Vidas extra-ordinarias” (Proceso extraordinario de ORP), que no es más que otra manera de empoderar a las personas con discapacidad intelectual al tiempo que se crean espacios inclusivos en las comunidades.

El director del centro, Sergio Aguinaga explica así el método de trabajo: “Aprovechamos el proceso ordinario de la ORP, de esa manera conocemos bien los objetivos de cada persona. Pero lo que llevó a este nuevo proceso,  fue pararnos a reflexionar en equipo, y darnos cuenta de que “el bosque no te deja ver los árboles”. Decidimos que además del proceso ordinario, debíamos individualizar el proceso y centrarnos en pocas personas y sus demandas, además de liberar un profesional “incluyer” como existen en otros centros y servicios de Fundación AMÁS, una vez analizadas las necesidades presenciales.”.

Un método que lleva a los profesionales a conocer individualmente a cada persona con discapacidad y buscar los medios y apoyos necesarios en cada caso concreto. “Los profesionales tenemos una reunión mensual para analizar o evaluar las ORP de cada usuario/a, ahí cada dos meses seleccionamos a cuatro personas para profundizar en sus sueños. La selección se realiza según sus demandas y necesidades familiares”

Pasillo de los sueños del Centro Municipal de la calle Sufragio en Leganés. Foto: Fundación AMÁS

Pasillo de los sueños del Centro Municipal de la calle Sufragio en Leganés. Foto: Fundación AMÁS

Por último, Sergio explica, “nos ponemos un plazo, un “deadline”, son 2 meses para fijar estos resultados, y después fotografiamos el resultado y lo exponemos en nuestro “pasillo de los sueños”, de esa manera motivamos a la gente a que demande y que sea la demanda la que siga moviendo el proceso. Si una persona ve el sueño cumplido de otra, la motiva y funciona como un efecto dominó. De hecho los que consiguen un objetivo no se quedan ahí, piden más y más…”.

Un trabajo que cuenta con un pilar fundamental, la figura del “incluyer”, un profesional de Fundación AMÁS que en el caso de Sufragio es Almudena Merino, su misión es buscar y gestionar oportunidades en el entorno para que las personas con diversidad funcional puedan cumplir sus sueños fuera del centro. Siempre en coordinación con el equipo de ORP. Otra cuestión interesante es que se valoran los apoyos en una escalera de preferencia, basada en la inclusión.

El centro ocupacional Sufragio, de la misma manera que el resto de los centros de Fundación AMÁS, es solo el punto de partida para proyectar al exterior vidas en las que deciden sus protagonistas.

Se llama: INCLUSIÓN.

 

La Fundación “Mejor Igual” apuesta por el modelo de Atención Temprana de Fundación AMÁS en su primera beca Pigamalión

Nuria Marín, Presidenta de la Fundación Mejor Igual con la familia de Liam. Foto: Fundación AMÁS.

Nuria Marín, Presidenta de la Fundación Mejor Igual con la familia de Liam. Foto: Fundación AMÁS.

 

A través de la Fundación “Mejor Igual”, la familia de Liam, que tiene un hermano mayor con diversidad funcional, ha obtenido una beca que ha permitido al pequeño recibir tratamiento de Atención Temprana en el Programa Primeros Pasos, subvencionado por Fundación AMÁS,  hasta obtener una plaza concertada por la Comunidad de Madrid.  Los padres, Irma y Elmer, valoran los avances del pequeño a través del modelo centrado en la familia que aplica Fundación AMÁS.

 

El proyecto Pigmalión de la Fundación Mejor Igual surge a través de una experiencia cercana a su presidenta Nuria Marín: “Nos dimos cuenta desde la Fundación que muchos niños y niñas no pueden recibir tratamientos de Atención Temprana desde los primeros meses por la escasez de plazas públicas y la imposibilidad de las familias de pagar los tratamientos”.

Gracias a esta empatía con la angustia de padres y madres de pequeños con diversidad funcional, surgió la beca Pigmalión en enero de 2019. El proyecto ha beneficiado ya a una familia con dos hijos que necesitan tratamientos de Atención Temprana. El pequeño, Liam, ha asistido durante tres meses al Centro de Atención Temprana de Fundación AMÁS, situado la calle Castilla la Vieja, de Fuenlabrada, allí los profesionales de la entidad aplican el modelo centrado en la familia.

“Se trata de una metodología participativa que incluye a padres y madres como piezas básicas de las intervenciones, partiendo de sus necesidades, se trabajan aspectos prácticos que empoderan a las familias a través de las estrategias pactadas con los profesionales”, explica Ruth Sastre, coordinadora del centro.

Las diferencias con el modelo tradicional de Atención Temprana han sido palpables para la familia de Liam, cuyo hijo mayor no ha asistido a tratamientos en los que se involucra a padres y madres. “Los avances logrados aquí gracias a Fundación Mejor Igual nos están sirviendo para la mejora de nuestros dos hijos”, aseguran Irma Ttito y Elmer Arenas.

Fundación Mejor Igual: Creando redes para que ninguna persona sea invisible.

La Fundación Mejor Igual tiene en marcha distintos proyectos tanto en España como en países del continente Americano, su objetivo es trabajar por un mundo en el que nadie sea invisible y en el que la diversidad se traduzca en riqueza.

Y con esa premisa nació la beca Pigmalión como nos cuenta la presidenta de la fundación, Nuria Marín: “Las familias viven situaciones dramáticas desde que les dan el diagnóstico de su hijo o hija hasta que reciben el tratamiento. Lo ideal es empezar cuanto antes, con pocos meses, no es justo que los padres y madres que no pueden pagar tengan que esperar con angustia a tener una plaza pública”.

Nuria Marín, Irma Ttito y Elmer Arenas. Foto: Fundación AMÁS

Nuria Marín, Irma Ttito y Elmer Arenas. Foto: Fundación AMÁS

Para lograr que ningún niño con diversidad funcional o del desarrollo se quede sin tratamiento y por tanto, un futuro mejor, la Fundación Mejor Igual hace visibles a todos estos pequeños: “Para que se extienda a más familias es necesario crear redes, apostar por la investigación y campañas de sensibilización a la sociedad”, asegura Nuria Marín.

Pequeños pasos que cambian pequeños y grandes mundos, como la familia de Liam, cuyos padres Irma y Elmer recibieron con la beca Pigamalión un regalo inesperado.

“No podíamos pagar Atención Temprana para nuestros dos hijos”

Cuando Irma Ttito y Elmer Arenas recibieron la noticia de que la Fundación Mejor Igual becaba el tratamiento de su hijo Liam en el Centro de Atención Temprana de Fundación AMÁS en Fuenlabrada, no se lo podían creer.

“Fue un gran alivio, ya tenemos el gasto del mayor y ahora con el pequeño no sabíamos que hacer, gracias a la beca Pigmalión Liam ha recibido tres meses Atención Temprana hasta que se nos ha concedido una plaza concertada por la Comunidad de Madrid para él”, nos cuenta Irma.  La difícil situación de esta familia llegó a la Fundación Mejor Igual a través de Asunción García,  doctora en neuropediatría que trata a los hijos de esta familia en el Hospital de Alcorcón, tras conocer el caso, la beca Pigmalión se trasladó al Centro de Atención Temprana de Fundación AMÁS en la calle Castilla La Vieja de Fuenlabrada.

Se trata de un centro pionero en la aplicación del modelo centrado en la familia por el que apuesta esta entidad y que ha supuesto importantes avances para Liam y sus padres.

“Nuestro otro hijo está en otra entidad, allí se queda solo con el terapeuta, nosotros no participamos, pero en Fundación AMÁS la Atención Temprana es más familiar, cuentan con nosotros y nuestros problemas”, nos dice Elmer.

Ahora Liam ha obtenido una plaza pública que le ha sido adjudicada fuera de Fundación AMÁS, algo que lamenta su madre, Irma: “Me hubiera gustado que siguiera aquí, sentimos que participamos en la mejora de nuestro hijo, por ejemplo con la terapeuta Miriam Chico, obtuvimos las herramientas para mejorar uno de nuestros grandes problemas: la alimentación de Liam”.

Herramientas que sirven para empoderar a esta familia de cara a mejorar la calidad de vida de sus hijos y que gracias a la Fundación Mejor Igual, ha supuesto un tiempo precioso para los avances de este pequeño. Se trata de un modelo apoyado por Plena Inclusión y respaldado por los especialistas más importantes del sector.

Pero quedan muchos otros niños y niñas a la espera de recibir Atención Temprana para convertirse en futuros adultos independientes y autónomos con calidad de vida, colaborar con ellos a través de la Fundación Mejor Igual es apoyar una sociedad más justa para todos los ciudadanos y ciudadanas.

Y gracias a ese apoyo otr@ pequeñ@ ha empezado ya a recibir Atención Temprana a través de la beca Pigmalión. Hasta que su familia obtenga una plaza pública, la Fundación Mejor Igual y los profesionales de Fundación AMÁS en el centro de la calle Castilla La Vieja de Fuenlabrada, siguen trabajando por crear futuro para los niños y niñas con diversidad funcional y sus familias.