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Isabel Benito y Juan Luis Heras en la acción solidaria con Grupo AMÁS. Foto: Grupo AMÁS.

Historias de un barrio de Móstoles: Héroes anónimos convertidos en runners solidarios

Isabel Benito y Juan Luis Heras en la acción solidaria con Fundación AMÁS. Foto: Fundación AMÁS.

Isabel Benito y Juan Luis Heras en la acción solidaria con Fundación AMÁS. Foto: Fundación AMÁS.

Isabel Benito y Juan Luis Heras son propietarios de dos pequeños comercios de Móstoles: Bar Zipi y Zape y J.L. Peluqueros, dos ejemplos de solidaridad que han decidido convertirse en “runners solidarios” colaborando en la X Carrera por la Inclusión que Fundación AMÁS celebra el 27 de mayo en beneficio de las personas con discapacidad intelectual.

 

 

No corren maratones, ni siquiera logran premios en carreras populares, pero Isabel Benito y Juan Luis Heras han decidido ser por un día “runners solidarios” con el derecho al deporte de las personas con discapacidad intelectual. Porque no es necesario ser un atleta para participar en la X Carrera por la Inclusión, “Inclusion Experience”, que Fundación AMÁS celebra el 27 de mayo en Parque Polvoranca (Alcorcón-Leganés) y los propietarios del Bar Zipi y Zape y J.L. Peluqueros lo han demostrado, ellos se han unido aportando premios para los ganadores en las diferentes categorías de esta carrera solidaria.

No es la primera vez que estos dos pequeños empresarios demuestran que uniendo fuerzas entre tod@s podemos cambiar el mundo y hacerlo un poco más justo. Ambos son héroes anónimos que luchan todos los días por ganarse la vida en sus negocios, sin olvidar a las personas de su barrio, desde niños y niñas con discapacidad intelectual, personas mayores sin recursos o vecinos que pasan por malas situaciones económicas. Grandes y pequeñas historias que merece la pena conocer.

De los niños y niñas de Atención Temprana a la Carrera por la Inclusión.

No es la primera vez que la peluquería J.L. Peluqueros y el Bar Zipi y Zape (Calle Río Tormes, 13 y 17 de Móstoles) apoyan los derechos de las personas con discapacidad intelectual y sus familias. El pasado 31 de enero ambos comercios ofrecieron cortes de pelo y cañas solidarias a cambio de donativos que fueron destinados íntegramente a los tratamientos de niños y niñas con discapacidad intelectual o de desarrollo, del Centro de Atención Temprana de Fundación AMÁS en Móstoles.

Juan Luis Heras, J.L. Peluqueros. Foto: Fundación AMÁS.

Juan Luis Heras, J.L. Peluqueros. Foto: Fundación AMÁS.

Juan Luis Heras, este peluquero de Móstoles lleva ya cinco años realizando esta acción solidaria, durante un día trabaja gratis para ayudar a las familias con menos recursos cuyos hijos necesitan tratamientos y que están en lista de espera. Donde no llega la sanidad pública, lo hace la solidaridad.

“He vivido en Móstoles toda la vida y es una ciudad solidaria”, nos dice Juan Luis, quien a raíz de una tragedia familiar sufrió toda una transformación personal: “Yo tenía un nivel de vida alto, pero me faltaba lo esencial, preocuparme por las personas que me rodean, ahora soy feliz”.

 Y es que Juan no solo es un excelente peluquero de caballeros, es además un hombre solidario y muy querido por sus vecinos. Tras superar muchos problemas personales está volcado en su familia, en su barrio y en todas las personas a las que puede ayudar: “Colaboro con Fundación AMÁS, corto el pelo y afeito a personas sin recursos los fines de semana, recojo juguetes, colaboro con Médicos sin Fronteras, Aldeas Infantiles…prefiero pasar por la vida haciendo algo por los demás”, nos dice sonriente.

Una historia parecida a la de Isabel Benito, junto a su marido regenta el Bar Zipi y Zape desde hace cuatro años: “La gente nos ayudó al principio, ahora nosotros intentamos devolver la solidaridad ayudando a personas necesitadas del barrio y patrocinando pequeños equipos de fútbol de Móstoles”.

Isabel Benito, Bar Zipi y Zape. Foto: Fundación AMÁS.

Isabel Benito, Bar Zipi y Zape. Foto: Fundación AMÁS.

Isabel, al igual que Juan, también ha colaborado con los niños y niñas de Atención Temprana en Móstoles: “En cuanto me lo propuso Juan, me salió del alma, me gustan los niños. Soy auxiliar de clínica, he trabajado con personas con discapacidad, desgraciadamente una lesión de rodilla me impide seguir ejerciendo mi vocación”.

Pero lejos de rendirse, Isabel ha buscado nuevas formas de ayudar a los demás, implicándose en la vida de su barrio, conociendo las necesidades de sus vecinos y aportando lo que puede y eso, es mucho.

 La última muestra es su implicación en la X Carrera por la Inclusión que Fundación AMÁS celebra el 27 de mayo en Parque Polvoranca, cuya recaudación íntegra se destina al deporte de personas con discapacidad intelectual de todas las edades. La peluquería J.L. Peluqueros y el Bar Zipi y Zape colaboran donando premios que recibirán los ganadores de las diferentes categorías en 5 km ó 10 km.

Como ellos no es necesario ser atletas para ser “runners solidarios”, todos podemos participar y correr en la misma dirección para construir un futuro más justo para todas las personas, sin distinciones.

Productos elaborados por personas con discapacidad intelectual en "Caprichos del hogar". Foto: Grupo AMÁS.

“Caprichos del hogar”: La tienda en Móstoles donde la artesanía se viste de solidaridad

Productos elaborados por personas con discapacidad intelectual en "Caprichos del hogar". Foto: Fundación AMÁS.

Productos elaborados por personas con discapacidad intelectual en «Caprichos del hogar». Foto: Fundación AMÁS.

El establecimiento, situado en la calle Pegaso número 23 de Móstoles, es un ejemplo de suma de calidad en decoración para el hogar y solidaridad. Desde hace unos meses vende entre sus productos varios artículos elaborados por personas con discapacidad intelectual del Centro Ocupacional Prado Regordoño (C/ Torres Quevedo, 11 Nave 19. Polígono Prado Regordoño. Móstoles), de Fundación AMÁS.

 

Entrar en la tienda “Caprichos del hogar” es palpar buen gusto, la artesanía está presente en todos sus productos, desde decoración para el hogar, hasta ropa infantil, una calidad que su dueña, Pilar Tarodo, mima con esmero, sin olvidar su otra pasión: la solidaridad.

Pilar Tarodo, propietaria de "Caprichos del hogar". Foto: Fundación AMÁS.

Pilar Tarodo, propietaria de «Caprichos del hogar». Foto: Fundación AMÁS.

“A mí me gusta ayudar a los demás, en especial a las personas que más dificultades tienen”, nos dice Pilar y ella lo ha demostrado a través de la inclusión en su comercio de productos realizados por personas con discapacidad intelectual del Centro Ocupacional Textil de Prado Regordoño en Móstoles, perteneciente a Fundación AMÁS.

Desde hace unos meses están a la venta en “Caprichos del Hogar” artículos realizados por usuarios y usuarias del Centro Ocupacional, comprobar la calidad de su trabajo y romper prejuicios es tan fácil como acudir a esta tienda situada en la calle Pegaso número 23 de Móstoles.

Perrito elaborado por artesanos con diversidad funcional intelectual. Foto: Fundación AMÁS.

Perrito elaborado por artesanos con diversidad funcional intelectual. Foto: Fundación AMÁS.

Allí, los clientes van a encontrar entre otras muchas maravillas para el hogar, complementos y ropa infantil, cinco artículos elaborados por artesanos con diversidad funcional intelectual: Perro salchicha, cojines de tapiz, bufandas, estuche para lápices y mochila de bebé con cambiador y bolsa para los pañales.

Bolsa para bebés. Foto: Fundación AMÁS.

Bolsa para bebés. Foto: Fundación AMÁS.

Varios clientes de Pilar Tarodo han adquirido alguno de estos productos “la gente reacciona muy bien, les explico dónde y por quien están elaborados, pero lo importante para el cliente es la buena calidad y el diseño”. Y eso es justamente el objetivo de este tipo de acciones, la inclusión social y laboral, la normalización del trabajo realizado por personas con discapacidad intelectual, sin paternalismos, tan solo valorando su aportación a la sociedad, al igual que ocurre con el resto de ciudadanos y ciudadanas.

Exterior de "Caprichos del hogar" en Móstoles. Foto: Fundación AMÁS.

Exterior de «Caprichos del hogar» en Móstoles. Foto: Fundación AMÁS.

Colaborar con esta causa es muy sencillo, San Valentín puede ser un buen momento para regalar artesanía, complementos, ropa infantil o del hogar en “Caprichos del hogar”, en este enlace se pueden visualizar sus artículos, aunque es mucho mejor visitar la tienda y conocer a Pilar, una mujer emprendedora y solidaria, ejemplo del mejor comercio de Móstoles.